10. Ruta: por las estrechuras de Guainos - Adra (Almería)

Toda provincia esconde siempre rincones sorprendentes y desconocidos. Parajes que se presentan como el lugar ideal para perderse. Ese es, precisamente, el caso de Las Estrechuras, un bello desfiladero encajado en la rambla de Guainos, en el  municipio de Adra, muy próximo al límite de la provincia de Almería con Granada

FICHA     DE   LA    RUTA
Realizada:	23/12/12	Distancia:	8,5 km (  ida y vuelta )
Duración:	3,5 h ( ida y vuelta)	Desnivel:	100m
Dificultad:	Baja	Localidad inicio:	Guainos Bajos - Adra (Almería)
Trazado:	PR 341 - Lineal - señalizado	Localidad fin:	Guainos Bajos - Adra (Almería)

Cómo llegar: Para llegar a nuestra ruta tenemos que dirigirnos al municipio de Adra desde la capital de la provincia, tomamos la Autovía del Mediterráneo A-7/E-15, dirección Málaga y continuamos  hasta la salida 384  hacia la barriada de Guainos Bajos, donde comenzamos nuestra ruta.

DESARROLLO: Comenzaremos este recorrido PR 341 en la playa de Guainos Bajos, (1) donde desemboca la rambla del mismo nombre, por la que realizaremos la subida, opcionalmente se puede comenzar en Guainos Altos.

Iniciamos nuestro camino por el cauce de la rambla y  observamos como mana directamente  del cauce como una fuente. 

A los 2 km  llegamos al barrio de Guainos Altos (2)  con multitud de cortijos abandonados.

Un poco más adelante llegamos a este punto (4) donde se bifurca el camino hacia la Ermita o hacia las estrechuras. Nosotros continuamos por el cauce del rio.

El cauce de la rambla comienza a estrecharse hasta la entrada de las Estrechuras donde empieza a fluir agua por numerosos puntos.

En el lateral izquierdo podemos observar como se lleva a cabo el aprovechamiento del agua mediante antiguas canalizaciones realizadas en las paredes casi verticales.

Es un zona de gran belleza. que en algunos momentos da lugar a angostas gargantas  y desfiladeros a las que hay que tener respeto, se confabulan para dotar de mayor atractivo a esta ruta.

zona escalones

En algunos momentos nos encontramos pequeñas ferratas con cadenas y escalones de hierro.

Esta galería, excavada por el agua en la roca madre con el paso de los siglos, provoca el asombro de los transeúntes por su singularidad y belleza.

Zona cadenas

Hay que tener en cuenta que el recorrido presenta algunas dificultades. La ruta, sin ser excesivamente complicada, requiere confiar en unas piernas predispuestas a patear durante unas horas un escarpado camino de agua y piedras y obliga a mantener despierto el sentido de la prudencia.

 La vegetación es la típica de estas zonas abundando sensiblemente las adelfas, tarays y cañaveral; acompañándose con lentiscos, retamas gandules, pegamoscas, hinojos, espino, esparragueras, aulagas,  etc.

Nos encontraremos varias ruinas de cortijos (5) y molinos con la imponente estructura de los cubos de los mismos.

Continuaremos nuestro itinerario río arriba no sin dificultad por el discurrir del agua por las rocas.

Pero, dejando de lado el pequeño esfuerzo,  el paseo tiene en todo momento su recompensa. Sobre todo, si se sabe apreciar la existencia de un rincón prácticamente desconocido y escondido en las estribaciones de Sierra Nevada y, sin embargo, tan próximo al Mediterráneo.

En algunos momentos del recorrido sortearemos algunos pasos “tomados” por los cañizos y las Adelfas.

A los 2 km de adentrarnos en las estrechuras iniciamos el descenso hacia Guainos Bajos (6) por el mismo recorrido.